Los electrodomésticos son elementos imprescindibles en nuestra cocina, sin embargo, debemos saber cuál es el mejor lugar para colocarlos y sacar así el máximo rendimiento de ellos .
Lo que debes saber
Agua: para evitar los cortocircuitos, debemos colocar los electrodomésticos alejados de zonas en las que se puedan producir fugas de agua.
Ventilación: no deben estar pegados a los muebles ni a las paredes para que puedan tener un espacio de ventilación.
Consejo: muchos electrodomésticos despiden calor, por lo que los muebles que estén cerca tendrán que ser resistentes a las altas temperaturas.
Es importante colocar cada electrodoméstico en el lugar indicado para evitar accidentes y riesgos de otro tipo. No sirve solo con colocarlos cerca de los enchufes, también debemos colocarlos alejados de instalaciones antiguas, zonas con un excesivo cableado, tuberías en mal estado, etc. De cualquier manera, si nuestros electrodomésticos sufren alguna avería.
Aumentar la vida útil de nuestros electrodomésticos
La buena colocación de cada electrodoméstico nos servirá también para alargar su vida útil.
La nevera o refrigeradora , por ejemplo, debemos colocarla lejos de focos de calor como la calefacción, la vitrocerámica o el horno. De este modo, evitaremos el sobrecalentamiento que puede provocar fallos en el frigorífico.
En el caso de la lavadora, tendremos que evitar colocarla en zonas a la intemperie. En muchas casas se coloca en el tendedero, donde sufre muy bajas temperaturas que pueden provocar un mal funcionamiento. Tampoco debemos colocarla pegada a ningún mueble, para que tenga espacio para la ventilación.
Espacios para la ventilación de los electrodomésticos
Por otra parte, el horno es un electrodoméstico que no podemos colocar en cualquier sitio. Los muebles que estén cerca deben estar preparados para soportar las altas temperaturas y ser resistentes al calor. Tampoco debe estar cerca de la pared para que, al igual que la lavadora, pueda “respirar”.
Para evitar cortocircuitos, el microondas debe colocarse alejado de zonas en las que haya agua.
La vitrocerámica, por otro lado, debe estar lejos del fregadero (al igual que el microondas), así evitaremos que caiga agua, que se le den golpes, etc. Y, si es posible, para evitar que se ralle o se rompa, no está de más colocar una tapa protectora que podemos comprar en cualquier tienda de muebles.
En cualquier caso, el espacio que tengamos disponible en la cocina es uno de los grandes problemas y, por ello, tendremos que adecuar todos estos consejos a los metros útiles de nuestra cocina.
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